El IVA verde podría salvar a la construcción al impulsar la rehabilitación de los hogares españoles. Así lo cree Asefave y la Asociación Española del Aluminio (AEA), que se suma a la reivindicación y aporta una serie de criterios para la aplicación del impuesto.
La propuesta de aplicación del IVA verde de Asefave está relacionada con la sustitución de ventanas, protecciones solares y cerramientos por otros energéticamente más eficientes, en línea con los objetivos de ahorro energético y reducción de gases invernaderos. La AEA se suma este reclamo para que puedan beneficiarse "aquellos que usen soluciones reciclables, poco nocivas con el medio ambiente o que sean ignífugas".
A la condición de mejora de la transmitancia térmica, el presidente de AEA, Armando Mateos, apunta los siguientes condicionantes necesarios para el impulso del plan renove a través de ese estímulo fiscal:
1. Reciclabilidad de los productos y soluciones escogidos. Que se valoren especialmente aquellos que no pierdan propiedades en sus sucesivas reconversiones, y cuyos procesos de reciclaje sean poco nocivos para el medio ambiente.
2. Baja peligrosidad de los aditivos o componentes químicos que integran el producto.
3. Cantidad de años que tardan en degradarse como residuo e incidencia en la cadena trófica.
4. Ignifugidad y resistencia al fuego, "que no deja de ser otro factor de sostenibilidad".
Según Mateos, los productos tendrían que ser puntuados según unso coeficientes para establecer un IVA escalonado, "donde se aplicara un menor porcentaje a los productos más sostenibles. Así, propone que a los productos con una calificación entre el 8,5 y el 10 (siendo 10 el producto perfecto), se le podría aplicar un IVA del 3%; a los que tuvieran una puntuación entre el 7 y el 8,5, un IVA del 9%, y así sucesivamente. "Así se favorecerían no solo las rehabilitaciones, sino que estas buscaran un resultado fuera lo más sostenible y respetuoso posible con el medio ambiente", mantiene.
Según Mateos, el aluminio “contribuye a crear edificios eficientes energéticamente, confortables, con el menor impacto ambiental posible, y cuyos componentes puedan reciclarse o reutilizarse. Algo que debe revertir positivamente en aquellos que hagan estos trabajos, o animar a otros, no solo por la mejora de parque inmobiliario de nuestro país, sino por la salvaguarda del medio ambiente", concluye.