En su última intervención, Kayati ha ejecutado con éxito un proyecto de demolición controlada en hormigón sin armar, destacando una vez más la versatilidad y eficacia del agente expansivo Cras en entornos técnicos exigentes.
Planificación técnica y perforación estratégica
El equipo optó por un esquema de perforaciones de 51 mm de diámetro, distribuidas en una cuadrícula de 0,20 x 0,20 metros, lo que permitió una aplicación homogénea del producto y una fracturación uniforme del material. Aunque el volumen estimado habría requerido 1.000 kg de Cras en condiciones estándar, se decidió duplicar la cantidad a 2.000 kg para asegurar el rendimiento, minimizar riesgos y optimizar el control del proceso.
Adaptación al clima: eficacia del Cras Amarillo
Las condiciones térmicas del entorno, con temperaturas entre -2 ºC y +8 ºC, condicionaron la elección del tipo de agente expansivo. En este contexto, Cras Amarillo demostró su idoneidad para climas fríos, acelerando el proceso de fracturación y permitiendo reducir los tiempos de ejecución sin comprometer la seguridad o estabilidad estructural.
Resultados: fragmentación precisa y sin impactos colaterales
La intervención se resolvió con una fragmentación precisa y controlada, sin generar vibraciones ni daños en las estructuras adyacentes. Este resultado refuerza la aplicabilidad de Cras en proyectos sensibles donde se requiere una alta precisión y mínima afectación del entorno.
Eficiencia, seguridad y tecnología aplicada
Este caso evidencia cómo la combinación de una planificación técnica rigurosa, la elección adecuada de herramientas y una correcta adaptación a las condiciones del entorno permite abordar con éxito demoliciones complejas. Para Kayati, el uso de Cras no solo garantiza eficiencia operativa y seguridad, sino que también consolida su posición como solución fiable y versátil en el ámbito de la demolición controlada.
|