El secretario general de Agenda Urbana, Vivienda y Arquitectura, Iñaqui Carnicero, ha visitado el campus del grupo portugués dstgroup en Braga, acompañado por su CEO, José Teixeira, y representantes de la Norman Foster Foundation. El encuentro tuvo como objetivo conocer el modelo de construcción industrializada con criterios de calidad arquitectónica desarrollado por la compañía, y explorar las bases para una posible Alianza Ibérica en materia de vivienda.
La visita se enmarca en un momento clave para España, coincidiendo con el desarrollo del Perte de la Industrialización de la Vivienda, impulsado por el Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana. Esta iniciativa busca modernizar el sector mediante el aumento de la productividad, la mejora de la sostenibilidad de los procesos y una mayor capacidad de respuesta ante la demanda habitacional.
Durante la jornada, Carnicero conoció el avance del Living Lab, un ecosistema de innovación en vivienda y urbanismo en desarrollo en el campus de dstgroup. Este proyecto cuenta con la colaboración de tres arquitectos galardonados con el Premio Pritzker: Norman Foster, Álvaro Siza y Eduardo Souto de Moura, y representa un modelo donde la excelencia arquitectónica se integra con los procesos constructivos industrializados.
La agenda incluyó también la presentación de soluciones de Zethaus, marca del grupo especializada en construcción modular, diseño paramétrico, eficiencia energética y automatización, con un enfoque centrado en la sostenibilidad y escalabilidad.
Hacia un modelo ibérico de industrialización con valor añadido
El impulso a la industrialización de la vivienda no se limita a la eficiencia productiva. Tal como destacaron los participantes, debe integrarse con una visión arquitectónica de calidad, atención al contexto urbano y valor cultural del entorno construido.
Ante la presión creciente para abordar la emergencia habitacional en ambos países, la experiencia de cooperación hispano-lusa —como ejemplificó la excepción ibérica en materia energética— abre la puerta a respuestas conjuntas con impacto a escala europea.
El Perte de la Vivienda Industrializada se plantea como una herramienta estratégica para transformar el modelo productivo del sector, combinando sostenibilidad, calidad arquitectónica y cohesión social. Su desarrollo podría servir como referencia para iniciativas similares en Portugal y reforzar así una visión compartida en la Península Ibérica, posicionándola como polo de innovación desde el sur de Europa en materia de construcción industrializada.