El dato de transacciones inmobiliarias publicado por el INE correspondiente a septiembre de 2025 registra un aumento mensual del 33,7% y un crecimiento interanual del 3,8%. Según María Matos, directora de Estudios de Fotocasa, las cifras confirman que la demanda continúa activa, impulsada por tipos de interés bajos, mayor confianza del comprador y una tasa de ahorro familiar aún sólida.
Septiembre cerró con 63.794 compraventas, lo que eleva el acumulado de los nueve primeros meses del año hasta 533.794 operaciones, un 14% más que en 2024. Se trata del mejor mes de septiembre de la serie histórica, superando incluso el máximo de 2007. Matos destaca que, si el ritmo cercano a las 60.000 firmas mensuales se mantiene, 2025 podría convertirse en el mejor ejercicio desde 2007.
Efecto de la política monetaria y reactivación de la demanda
La portavoz subraya que la recuperación de la demanda está directamente relacionada con el cambio de rumbo del BCE, que ha favorecido el retorno al mercado del 21% de los compradores. Recuerda que en 2022 el 40% se vio afectado por el brusco encarecimiento de los tipos, paralizando la operación en el 19% de los casos. Parte de la actividad actual procede de compradores que habían detenido su decisión a la espera de condiciones hipotecarias más favorables.
Obra nueva: fuerte demanda y limitación de la oferta
Las operaciones de vivienda nueva aumentan un 10,8% interanual, hasta 13.823 compraventas, el 21,7% del total. Según los datos de Fotocasa Research, el 20% de los compradores solo busca obra nueva y un 65% la valora como alternativa durante el proceso. No obstante, Matos advierte de que esta presión puede derivar en nuevas subidas de precios ante las dificultades de los promotores para acceder a suelo, financiar proyectos y afrontar el aumento de costes de materiales, la burocracia y la falta de mano de obra, factores que limitan el ritmo de producción.
Previsiones para el cierre de 2025
La estabilización del Euríbor y de los tipos continuará dinamizando la compraventa. Un 21% de la demanda actual reconoce estar influida por las mejoras en la financiación y un 7% ha comprado vivienda este año pese a no tenerlo previsto. Otro 14% permanece a la espera de consolidación de condiciones, lo que podría sostener el crecimiento en los próximos meses.
Matos señala que la inestabilidad geopolítica refuerza la vivienda como activo refugio, y que medidas como los avales ICO facilitan el acceso a jóvenes y familias, hasta el punto de que uno de cada tres compradores jóvenes entrará al mercado gracias a estas ayudas.
Este escenario está generando una demanda sobredimensionada, lo que acentúa la presión sobre la oferta y mantiene la tendencia alcista de los precios durante 2025. Aunque en algunos casos la cuota hipotecaria puede ser inferior al alquiler, el encarecimiento del precio de compra dificulta el acceso, especialmente para quienes presentan brecha de accesibilidad.
Con un Euríbor estable y sin nuevas bajadas de tipos previstas, el mercado hipotecario mantendrá su fortaleza. Si el ritmo actual continúa, 2025 podría cerrar con alrededor de 710.000 compraventas y más de 470.000 hipotecas, configurando el mejor resultado de la última década. Sin embargo, Matos advierte que la prolongación de esta política monetaria expansiva puede provocar nuevas tensiones al alza en los precios, dado que la oferta no crece al mismo ritmo que la demanda.




