La localidad de Rafelbunyol (Valencia) acoge la primera vivienda certificada como Passivhaus Premium en la Comunitat Valenciana, afirman desde la entidad. Un proyecto que refuerza la implantación de estándares de alta eficiencia energética en el ámbito residencial. Diseñada por el estudio ra[ ]el Arquitectura, la Casa M&M se caracteriza por la aplicación de soluciones técnicas avanzadas en su diseño y ejecución constructiva.
Sistema Sate Rhonatherm para una envolvente eficiente
Uno de los elementos determinantes para alcanzar esta certificación ha sido la instalación del sistema de aislamiento térmico por el exterior (Sate) Rhonatherm, aplicado por Grupo Pimat sobre una fachada de fábrica cerámica con estructura de hormigón. El sistema se compone de paneles de lana de roca de 120 mm, lo que ha permitido cumplir con los requisitos de transmitancia térmica, estanqueidad y reducción de la demanda energética establecidos por el estándar Passivhaus Premium.
La envolvente térmica alcanza un valor U de 0,229 W/(m²·K) en los muros exteriores, lo que garantiza un elevado rendimiento térmico durante todo el año. Además de su capacidad aislante, el sistema Rhonatherm ofrece un acabado exterior duradero, contribuyendo a la durabilidad de la envolvente y a la estabilidad térmica del edificio.
Integración de sistemas pasivos y activos
La estrategia energética de la vivienda se completa con otros elementos clave: cubierta aislada con XPS, ventilación mecánica con recuperación de calor, recuperación de aguas grises, y un sistema fotovoltaico capaz de generar cuatro veces más energía de la que consume la vivienda. Todos estos sistemas se integran en un entorno domótico que permite una gestión eficiente de la climatización y el confort interior.
Eficiencia energética y sostenibilidad
Casa M&M demuestra la viabilidad técnica de alcanzar los niveles más exigentes de eficiencia energética mediante el uso de soluciones constructivas especializadas como el sistema Rhonatherm SATE. Este tipo de envolvente contribuye a reducir el consumo energético, mejorar la calidad ambiental interior y prolongar la vida útil del edificio, en línea con los principios de la construcción sostenible y la edificación saludable.