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El consumo de cemento en España ha caído un 3,3% en abril, situándose en 946.329 toneladas, 32.478 toneladas menos que hace un año. Este dato mantiene en negativo la evolución del consumo durante los cuatro primeros meses de 2016, con un descenso del 1,2%.
“El comportamiento de la obra pública está siendo mucho peor de lo esperado y no se corresponde con los presupuestos aprobados por las administraciones públicas, lo que significa que hay una ralentización de las obras puestas en marcha”, explica el director general de Oficemen, Aniceto Zaragoza.
La Agrupación de Fabricantes de Cemento de España considera urgente la toma de medidas que favorezcan la recuperación del consumo interno e incentiven la competitividad del sector a nivel internacional.
