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Con motivo del Día Mundial del Medioambiente, celebrado cada 5 de junio, Ursa ha hecho públicos los últimos avances en su estrategia de sostenibilidad y economía circular. En 2024, la compañía ha reincorporado 41.366 toneladas de materiales reciclados en sus procesos productivos, consolidando su apuesta por una construcción más eficiente y respetuosa con el entorno.
Del total, 35.133 toneladas corresponden a vidrio reciclado utilizado en la fabricación de lana mineral, procedente tanto del propio proceso industrial de Ursa como de fuentes externas, entre ellas la industria del automóvil. Esta cifra representa un incremento del 16,5% respecto al ejercicio anterior y confirma una tendencia de crecimiento sostenido en los últimos cinco años.
En el caso del poliestireno extruido, XPS, Ursa ha reutilizado 6.233 toneladas de material reciclado, con residuos provenientes principalmente de la industria alimentaria. Esto supone un aumento del 3,9% respecto a 2023 y un crecimiento acumulado del 59,3% en los últimos seis años.
Desde 2019, la compañía ha reciclado en total 162.007 toneladas de vidrio y 42.479 toneladas de poliestireno, consolidando una trayectoria basada en la reutilización de recursos y la reducción del impacto ambiental asociado a la producción de materiales aislantes.
“El reciclaje no es una acción puntual, sino un eje estructural de nuestra actividad”, afirma Miquel Tena, director de fábrica de Ursa. “Cada tonelada que reincorporamos nos acerca a una industria más circular y una edificación más responsable”.
Además de reducir el consumo de materias primas vírgenes y minimizar la generación de residuos, el uso intensivo de materiales reciclados también reduce las emisiones asociadas al proceso productivo. Estas prácticas están alineadas con los requisitos de certificaciones ambientales como Leed, Breeam o GBCe-Verde, y respaldadas por el Distintivo de Garantía de Calidad Ambiental, que avala un contenido mínimo del 60% de material reciclado en los productos de la marca, aunque en la práctica los porcentajes reales superan esa cifra.
“Con un crecimiento cercano al 60% en el uso de reciclados en los últimos seis años, reafirmamos nuestra voluntad de reducir residuos, optimizar recursos y fabricar soluciones que no solo mejoren la eficiencia energética de los edificios, sino que lo hagan con una menor huella desde su origen”, concluye Tena.
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